Siempre he considerado que todos los traumas y sensaciones que experimenta una persona cuando es niñ@, le marca plenamente en la edad adulta.
Desde bien pequeña siempre vivía las cosas de firma muy diferente a los demás: podía notar la tristeza o emociones de la gente y sentirlas como si fueran mías, podía saber si a alguien le pasaba algo y qué le pasaba sin que me lo dijera, podía ver a familiares difuntos e incluso soñar con ellos, en mensajes que me enviaban o premoniciones… Todo eso y mucho más lo vivía, totalmente SOLA.
Ningún adulto era capaz de saber cómo gestionar eso, aunque me vieran como una persona «especial», eso tan solo me ayudaba a verme como «un bicho raro» y a tener más miedo a eso desconocido.
Cuando una compañera mía me hizo llegar el libro de Teresa, Mamá, he visto al abuelo, supe que eso me abriría todas las puertas que hasta entonces, siempre había encontrado cerradas.
Gracias a ese libro supe que Teresa impartía cursos online, así que me lancé a la experiencia de ser ayudada en aquello que nunca había sabido gestionar.
No creo en los milagros pero si en la energía, y que todo llega en su debido momento cuando más lo necesitamos. Gracias a ella y a todos mis compañeros del curso Soy Sensitivo Plus, he sabido entender y apreciar este don que se me ha concedido y a quererme como me merezco. Cada ejercicio hecho en clase me ha ayudado a afrontar mi vida cotidiana y a querer aprender más.
Todos tenemos miedo en conocer este mundo que siempre nos han ocultado. Pero es necesario abrirle la puerta para que entre y ver lo maravilloso que es.
¡Gracias Teresa por esta bonita experiencia!
